Adios a un alcalde

Ya se acabo tu imperio, nacido del ocaso de las viejas Rosas, cultivado con soberbia y mecido por el vaivén de tus cambiantes aspavientos. Una moción temida, te lanza su cornada mortal, nunca imaginaste que un aspirante, un juguete para D. P.P., fuera más capaz que tú, para negociar, tuviera tanta capacidad para convencer y que a la primera envestida te hiciera cambiar de situación. Cortó vuestra fogosa respiración, se os helo hasta el aliento, pero fue real, ya no eres alcalde. Bajo la batuta de un aspirante que te recibió en las filas del Partido Popular, con la experiencia de una Socialista tenaz, junto a las renovadas cenizas del fénix, ha nacido un nuevo gobierno, un gobierno del partido que quiere a Catral.
Te faltan dos años para poder aspirar a la alcaldía, te falta también aquel equipo de hombres y mujeres, entre 15 y 80 años, que querían que tuviera una oportunidad el Partido Popular, te falta la confianza de un pueblo que se siente engañado, un pueblo que tuvo que votar a listas emparejadas desde Alicante, tu Central, un pueblo que vio como tuvieron que abandonar tantos Zaplanas que te ayudaron a ganar.

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